miércoles, 1 de junio de 2022

LA COMUNIDAD VALENCIANA LANZA UNA PROPUESTA DE DESCENTRALIZACIÓN DEL ESTADO

Un informe académico encargado por Puig justifica que Puertos del Estado esté en Valencia y parte del Senado en Barcelona para "la reconexión emocional" con los ciudadanos


La Comunidad Valenciana agita el debate sobre el modelo de Estado. Otra vez. Es uno de los temas que ha logrado un cierto hueco en la agenda estatal y con el que vuelve a generar debate y resonancia (en el centro). El seminario España Polifónica y Desconcentrada ha sido el marco de presentación de un informe que plantea una propuesta inicial de descentralización de instituciones. Los promotores incidían ayer en la idea de principio de camino, no de final, de borrador a completar con datos económicos precisos. Pero la propuesta ahí está ya, como forma de provocar debate y atraer el foco. De zarandear un asunto que cuesta ver desde el centro (cualquier centro, porque en las autonomías también hay centro). La relevancia política del acto la refleja la presencia institucional del president de la Generalitat, Ximo Puig, y del ministro de Universidades, Joan Subirats, conocedor del tema en su faceta académica.

El informe contempla ideas de desconcentración de sedes que han ido surgiendo en los últimos años (algunas son clásicas), junto a otras novedosas que se han añadido. El valor es pasar a formar parte ahora de una propuesta formal y precisa, aunque no cerrada. El objetivo del profesor de la Universitat de València Juan Rodríguez Teruel, director del seminario y del informe, es mejorarlo a partir de ahora con "argumentos técnicos y económicos del impacto y los costes que podría ocasionar".

En la parte concreta y valenciana, la propuesta es que Puertos del Estado tenga su sede central en València. Además de ello, el informe de la cátedra universitaria Prospect 2030 también sugiere reubicar parte del Senado en Barcelona (otra idea que no es nueva). Tampoco lo es que el Tribunal Constitucional lleve su sede a Cádiz (por razones históricas). Asimismo, la propuesta valenciana es que el Supremo se relocalice en Castilla y León y el de Cuentas, en Aragón, mientras que el Consejo de Estado estaría en Castilla-La Mancha. Hay, por tanto, una voluntad de equilibrio territorial en una nueva distribución de instituciones del Estado. El planteamiento también es crear subsedes de los grandes museos nacionales (el del Prado y el Reina Sofía) en Murcia, Cantabria y Andalucía. Son solo algunos ejemplos.

ES URGENTE UNA FORMACIÓN TECNOLÓGICA EN ESPAÑA

El proceso de digitalización de la economía y de la sociedad española corre el riesgo de quedar a medias e ir más lento de lo necesario como consecuencia de la falta de profesionales preparados para llevarlo a cabo. La alarma la ha dado el presidente de la Confederación Española de Organizaciones Empresariales (CEOE), Antonio Garamendi, al advertir que faltan cerca de 100.000 personas con diferentes perfiles técnicos para atender la demanda tecnológica de las empresas.
España puede llegar tarde para subirse al tren del progreso tecnológico. La digitalización es un sector estratégico para cambiar el modelo productivo hacia un sistema de mayor valor añadido y de empleos de mayor calidad. Y nuevamente ha sido también el sistema educativo el que ha fallado en sus previsiones y escenarios de futuro.

Urge un plan de choque educativo para no perder el tren de la digitalización

Por supuesto que en España faltan también camareros, cocineros, peones agrícolas, trabajadores de la limpieza y de la construcción, ya sean hombres o mujeres. Pero desde un punto de vista estratégico es mucho más importante, dicho sea con el máximo respeto para los oficios citados, poder contar con los profesionales necesarios para desarrollar el escenario tecnológico de la nueva economía y de la nueva sociedad del siglo XXI.

Es muy urgente, por tanto, impulsar de inmediato un plan de choque para la masiva formación de profesionales especializados en las nuevas tecnologías del presente y del futuro. Todo el sistema educativo debe sumar esfuerzos, debidamente coordinados, para impulsar ese plan de formación masiva, en colaboración con las patronales y los sindicatos. Nos jugamos el futuro. Se trata de diseñar cursos prácticos, acelerados y adaptados a las necesidades del sistema productivo y social. El Gobierno central y los gobiernos autonómicos deberían liderar de inmediato dicho proceso, que podría entrar bajo el marco de la financiación de los fondos europeos. Hay capacidad suficiente para reaccionar y debe reaccionarse.

A la vez se hace necesario impulsar también un plan de atracción de profesionales con talento tecnológico del extranjero –por ejemplo, de India, China o Japón– para contribuir a la formación de los trabajadores españoles y, asimismo, para cubrir las necesidades productivas más urgentes de las empresas.

Al mismo tiempo es de una enorme importancia incentivar la incorporación de estudiantes, especialmente mujeres, en los ámbitos universitarios de ciencias, tecnología, ingeniería y matemáticas, conocidos bajo el acrónimo de estas palabras en inglés: STEM. El número de estudiantes en estas carreras en España es muy bajo en comparación con otros países desarrollados.